La riqueza cultural de una región se ve en sus tradiciones y comida. La gastronomía refleja la historia y herencia de muchas comunidades. Un ejemplo es el mole negro de Teotitlán del Valle, que mezcla sabores fuertes con técnicas antiguas.
Preparar platos emblemáticos usa ingredientes locales y un conocimiento profundo de las recetas. El mole negro de Teotitlán del Valle es más que un plato sabroso. Es un símbolo de la unión familiar y comunitaria, mostrando la importancia de la cohesión social en Oaxaca.
Mole Negro de Teotitlán del Valle:ingredientes y preparación
Ingredientes:
– 500 g de chiles secos (ancho, mulato y chipotle)
– 200 g de almendras
– 100 g de pasas
– 3 tortillas de maíz
– 1/2 cebolla
– 3 dientes de ajo
– 3 tomates
– 1 hoja de laurel
– 1 ramita de canela
– 5 clavos de olor
– 5 granos de pimienta negra
– 1/2 cucharadita de comino
– 2 tazas de caldo de pollo
– Sal al gusto
– 1 pieza de pollo (muslos o pechugas)
Modo de preparación:
1. Tuesta los chiles secos en un comal a fuego medio hasta que estén fragantes. Retira el tallo y las semillas.
2. En el mismo comal, tuesta las almendras, las pasas y las tortillas hasta dorarlas ligeramente.
3. Asa la cebolla, los ajos y los tomates hasta que estén suaves y ligeramente quemados.
4. En una licuadora, mezcla los chiles, almendras, pasas, tortillas, cebolla, ajos, tomates, laurel, canela, clavos de olor, pimienta negra y comino con un poco de caldo de pollo hasta obtener una mezcla homogénea.
5. Calienta un poco de aceite en una olla grande y vierte la mezcla de mole. Cocina a fuego medio, removiendo, hasta que espese.
6. Agrega el pollo y el resto del caldo de pollo. Cocina a fuego lento durante 30-40 minutos, hasta que el pollo esté cocido y tierno.
7. Rectifica la sal y sirve caliente, acompañado de arroz y tortillas.
Cómo mejorar esta receta de Mole Negro
Para mejorar el Mole Negro de Teotitlán del Valle, usa ingredientes frescos y de calidad. Es importante tostar bien los chiles y especias para resaltar sus sabores. No dejes que se quemen.
Además, no te apresures en la cocción. Los sabores deben integrarse lentamente. Tómate tu tiempo y ajusta la textura según tu gusto. Un buen mole debe equilibrar lo dulce y lo picante. Prueba y ajusta durante la cocción.
